La fuerza de la fe

Hola de nuevo!

Acabo de llegar de una misa y en el coche venía pensando en unas jóvenes que traje de vuelta. Habían ido andando unos cinco kilómetros para participar de la misa en la comunidad vecina. Dos de ellas habían llegado a casa del colegio poco antes de salir. Comieron rápido, se dieron un baño y fueron para la misa. Hay muchos que todavía dicen que los jóvenes no quieren nada y que no se interesan por Dios, pero estas cosas nos hacen ver que no es así. Hoy en la misa la mayoría eran jóvenes, que no van por cumplir, ni mucho menos. Dios sigue interesando a la gente, lo que a veces no interesa es el modo como es comunicado. No se trata de buscar sólo números y si de recuperar el espíritu de las primeras comunidades como fermento en la masa.

Por lo demás sigo con el corre-corre. Esta semana tuvimos reunión de la Coordinación Diocesana de Pastoral y estoy celebrando dos misas por día para que no se queden sin misa mucho tiempo en las comunidades, pues van a tener que esperar más de tres meses para tener la próxima. También tuve que hacer de guía de unos belgas que estaban con el obispo. Ellos querían ir para Lençois que es la ciudad que más se aprovecha del turismo en la región, pero yo les dije que mucho mejor Andaraí. Así los de Andaraí ganan alguna cosa (restaurantes, guias...).

Bueno, me voy a la segunda misa del día. Espero que sea tan gratificante como la primera. Al final la gente siempre nos da lecciones.

Un abrazo para todos/as.


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