Semana de la Familia, tiempo de gracia para las comunidades de Piritiba

Hola a todos/as:

Todavía estoy con el "subidón" de la Semana de la Familia, sin duda el momento más importante desde que llegué a Piritiba. Comenzó el domingo, día 9 y tuvo su punto culminante en la gran fiesta de las familias de este último domingo, día 16.



Ha sido un tiempo de gracia para las comunidades de Piritiba, pues ha habido encuentros en la ciudad y en la zona rural y la participación ha sido muy buena, tanto a nivel numérico como de implicación a la hora de hacer las cosas e intervenir en los debates. Durante ocho días las familias han reflexionado a partir del tema, el Amor es nuestra Misión: la Familia plenamente viva, que coincide con el tema del VIII Encuentro Mundial de las Familias, que tendrá lugar en Filadelfia el próximo mes de septiembre y en el que estará presente el Papa Francisco. 



Siempre digo que no creo en una Iglesia en la que haya personas que se consideren o sean consideradas como imprescindibles y por eso intento favorecer la participación de cada vez más gente en los diferentes trabajos que son llevados a cabo en las comunidades. La Semana de la Familia ha ayudado a que las comunidades vayan percibiendo eso y se den cuenta de que son capaces de hacer las cosas y hacerlas bien. Al fin y al cabo, la misión consiste en plantar, para ver si un día los frutos son cogidos y el mejor fruto es hacer que la gente sea cada vez más autónoma en la vivencia de la fe. También es verdad que después puede llegar un dictadorcillo de tres al cuarto y destruir todo a las primeras de cambio. Pero bueno, esos riesgos siempre se corren.


Lo que queda de esta semana es la animación que se percibe en la gente y que puede llevar a avivar una llama que se había ido apagando por diferentes motivos, provocando la división y el desánimo entre unos y otros. Al final de la misa con la que se encerraba la Semana de la Familia decía que tenemos que estar convencidos de que juntos somos más, lo que provocó que la gente empezase a aplaudir espontáneamente. Eso me da ánimos de cara al futuro, pues la misión, cuando es en común tiene, sin duda, mejores resultados.

Un abrazo.






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