Sin parar en ningún lugar

Semanas como esta te hacen pensar que no estás en ningún sitio o que tal vez estás en demasiados, pero las circunstancias mandan y la falta de obreros hace que se multiplique el trabajo para los que estamos.

El sábado pasado tuvimos asamblea diocesana de las CEBs en Ruy Barbosa, dormimos allí y el domingo por la mañana nos vinimos para Itaetê, aprovechando para parar en el camino y celebrar una misa en una comunidad de la zona rural de Andaraí. El lunes volví para Andaraí para hacer un poco de aventura y despejar la cabeza visitando una cascada (¿a que es chula?). Por cierto me fui con la cabeza caliente después de discutir con una concejala porque en el primer día de clase un autobús escolar, al que podrían cambiar el cartel de transporte escolar por transporte de ganado, se saliese de la carretera y hubiese varios heridos. Es indignante la situación de los autobuses escolares. Estos autobuses, generalmente son de gente próxima al ayuntamiento que compra autobuses que se caen en pedazos y que los alquila para el ayuntamiento a precios de escándalo. Lo peor de todo es que nadie hace nada, cuando en realidad deberían denunciar al dueño del autobús y al alcalde para que les metan en la cárcel y dejen de aprovecharse de esta pobre gente.

El martes fue día de reuniones en los núcleos de Andaraí, como toda primera semana de mes. Miércoles y jueves seminario sobre romerías en Ruy Barbosa y vuelta para Andaraí, para tener más reuniones y misas el jueves de vuelta, el viernes y el sábado... Hoy he venido para Itaetê, después de tener misa en Igatú (que algunos conocéis). Ahora me voy para celebrar la misa final de la misión en una comunidad de Itaetê y mañana nos vamos a participar del retiro diocesano... Vida movida.

Afortunadamente está lloviendo, que ya estaba haciendo mucha falta. Eso hace que el calor aumente, porque en cuanto para de llover vuelve a calentar el Lorenzo que no veas.

Ayer también recibí la visita de la comunidad de la Trinidad de Salvador, un grupo de gente que trabaja con transeúntes y que estaba peregrinando estos días en la región. Son gente de Dios, diferentes a la mayoría, que tienen una visión de la vida muy diferente de la mayoría y que siempre son un desafió para que nos convirtamos, especialmente en este tiempo de cuaresma.

Hasta otro día.

Un abrazo.

Comentarios

  1. como mola la cascada.....que envidia...
    bsitos y cuidate.

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  2. ¡Qué bonita! Por cierto, ¿cuántos kilos has perdido ya? Espero que te estés cuidando. Un abrazo y hasta muy pronto
    Isabel

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