Tiempo de espera

Hola a todos/as:

Ya hace diez días que no doy noticias por estos lares virtuales, uno va haciendo una cosa y otra y no consigue encontrar un momento para compartir las andanzas. El comienzo del adviento ha sido sin grandes novedades. Es tiempo de espera, aunque todavía está en el subconsciente que esta época debe ser de frío...

El final del año, que aquí coincide con el final de curso y las vacaciones de verano, hace que se vayan cerrando las cosas y viendo como se programa el próximo, es tiempo de hacer balance... 

Con el tiempo de adviento empezó el Año de la Paz, lo cual ha sido una buena idea por parte de la Conferencia Episcopal Brasileña, pues la violencia es una lacra que cada vez destruye más este país, matando cada vez más gente, especialmente jóvenes. Esperemos que sea un tiempo que ayude a reflexionar y a cambiar la realidad social.

Ayer, día de la Inmaculada, fui a una comunidad de Itaetê para celebrar la fiesta de la comunidad, pues Erivaldo estaba en Piritiba. Fue un buen momento para reencontrarme con la gente de allí. Es una comunidad de la zona rural, que demostró una vez más el esfuerzo que hacen estas comunidades para realizar el trabajo del día a día. Después de la misa, tuvimos comida para todo mundo y un poco de fiesta con la gente de la comunidad. Todo de una forma sencilla, pero que mostró la alegría de esta gente.

Hoy fue día para pasar por el médico para poder continuar yendo para acá y para allá por unos días más.

Un abrazo a todos/as.

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