Tiempo de descubrir lo que Dios quiere

Hola a todos/as:

El miércoles de ceniza me lleva a pensar en cómo las cosas pasan rápido, de un día para otro, cómo la propia sociedad incentiva cosas diferentes en cortos espacios de tiempo. Lo que nos toca es entender lo que está detrás de cada cosa que vivimos y que eso nos ayude a crecer.

El último post lo escribía en México, donde continué hasta el pasado miércoles. Después de los días de encuentro, los que habíamos ido de Brasil aprovechamos para conocer Puebla, donde visitamos el lugar donde tuvo lugar la Conferencia de Puebla en 1979, que tanto influyó en la vida de la Iglesia Latinoamericana, proclamando la necesidad de que la Iglesia hiciese opción por los pobres. Visitando el museo arqueológico nacional pude comprobar la riqueza de las diferentes cultura que a lo largo de la historia habitaron aquellas tierras. A veces uno piensa que la historia o la civilización comienza con nosotros, pero pensar eso es una prueba más de que somos cortos de miras. 

La vuelta fue un poco larga, pues entre aviones, autobús y las diferentes paradas en un sitio y otro, tardé casi 48 horas desde que salí de México hasta que llegué en casa.

Al llegar retomé las actividades en las comunidades. Este fin de semana de carnaval no ha sido posible hacer muchas cosas, pues aquí es fiesta el lunes y el martes. El comienzo de la cuaresma va a hacer que se intensifiquen un poco las actividades, lo que nos ayudará a entrar en el camino de la conversión y descubrir lo que Dios nos está pidiendo en este momento. 

Un abrazo.  

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