Un Dios siempre presente en la vida de los más sencillos

Hola a todos/as:

A veces uno se sorprende con como las personas dan testimonio de la presencia de Dios en su vida, gente sencilla, que espontáneamente empieza a hablar y que hace que uno se pregunte muchas cosas sobre la forma de entender a Dios, a veces tan racional, tan teórica, tan teológica... Pasamos la vida estudiando sobre las cosas de Dios, hablando sobre Él y quien nunca estudió (probablemente es alguien que ni sabe leer) nos hace ver su presencia de forma clara y transparente. Son pruebas claras de que Dios existe, pues esas ideas no fueron aprendidas como algo teórico y sí como una experiencia vital.

También me sorprendo con las ganas que la gente tiene de aprender, de descubrir cosas nuevas y como eso ayuda a la gente y a las comunidades a crecer. Hoy tuve dos reuniones con dos grupos de comunidades de la zona rural de la parroquia. Me sorprendo con la participación de tanta gente y con el interés que muestran para descubrir cosas nuevas desde su sencillez. No son grandes tratados de teología lo que se expone y sí elementos que pueden ayudar en el trabajo misionero, buscando como hacernos presentes como Iglesia en la vida de la gente. Descubrir el camino para hacernos presentes en la vida de los jóvenes y en los ambientes en que ellos viven su día a día, para ayudar a cada católico a sentirse responsable por la vida y misión de su comunidad.

Considero estos momentos de encuentro y de formación como elementos determinantes para que la gente pueda crecer y ganar en autonomía, pues no podemos pretender que nadie, en la medida en que se hace adulto, sea dependiente de los otros. Tratar a un adulto como si fuese un niño no hace que él pueda crecer. Tengo la impresión de que poco a poco las comunidades y la gente va ganando en autonomía. Los avances son todavía pequeños, pero espero que sean firmes.

Los días van pasando, tengo la impresión de que muy deprisa, pero es en ese paso del tiempo que debemos descubrir a ese Dios Vivo que camina con nosotros. Esta semana he pensado en eso a partir de las diferentes actividades de las que participé: encuentro del clero, misas en las comunidades, fiesta de una comunidad, formación con los animadores, escribir alguna cosa sobre la Asamblea de los Obispos de Brasil... Cada día tiene su afán, el desafío es descubrir cual corresponde a cada momento...

Un abrazo.

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