¿Cuando va a despertar esta gente?

Hola de nuevo:

En el último número de la revista Vida Nueva, Anastasio Gil, Secretario de la Comisión Episcopal de Misiones y nuevo Director de Obras Misionales Pontificias díce: "Un misionero es el exponente claro de la dimensión solidaria y humanitaria de cualquier ser humano. Contemplar como un hombre o mujer, independientemente de los motivos es capaz de olvidarse de sí mismo para ayudar a los más necesitados, no solo es digno de admiración, sino también de complicidad. Si quieres ser solidario con la humanidad, hay que descubrir el ejemplo, el modo de hacer de un misionero. Encarna lo que es la identidad del voluntario, distinta a la del cooperante. El cooperante va a ayudar cuando existe una catástrofe natural o bélica; el misionero no necesita ir, porque ya está allí y allí se queda. El misionero es la mejor apuesta para una humanidad donde sea posible la dignidad de la persona en todas sus dimensiones". Ante esas palabras uno no puede por menos de intensificar el trabajo y continuar luchando para que el Evangelio sea cada día más conocido y la sociedad cada día más justa.

El sábado por la mañana tuvimos reunión con los animadores de las comunidades. Estuvimos trabajando un poco las nuevas directrizes para la evangelización y las orientaciones pastorales y viendo como hacer alguna cosa que sirva como señal en referencia al medio ambiente, tema de la Campaña de la Fraternidad. Estamos viendo como conseguir una ley de iniciativa popular que prohiba las bolsas de plástico en las tiendas del municipio. No va a ser fácil, pero la gente está dispuesta a hacer lo posible. También estamos intentando concienciar a la gente sobre la necesidad de colaborar para que la parroquia se pueda mantener con el dinero de las propias comunidades. No es bueno seguir como estamos, dependiendo de dinero de fuera para casi todo.

Por la tarde nos fuimos para Andaraí hasta el domingo por la mañana. Por la tarde tuve misa en una comunidad donde algunos se aprovecharon de los otros para conseguir luz para ellos, dejando a los otros sin nada. Estoy luchando para que los que quedaron fuera puedan entrar en el proyecto de Luz para todos. Los que no hicieron las cosas como debían creo que están con miedo de mi, porque no aparecieron en la misa. Por la noche tuvimos la Primera Comunión de seis adolescentes (bien diferentes de lo que se hace en España). Fue una cosa simple y bonita. Está claro que sin fiestorro.

El lunes fui a la reunión de los concejales. Uno de ellos fue denunciado de salir con el coche oficial para una fiesta y después de una semana no lo había devuelto (aquí si que es para estar indignados...).

El martes tuvimos reunión del clero en Ruy Barbosa. No tratamos cosas especialmente interesantes, pero siempre es bueno ver cómo podemos caminar juntos y hacer el trabajo evangelizador mejor. A la vuelta tuvimos curso de formación bíblica en Andaraí.

Ayer por la mañana tuvimos una reunión con el alcalde de Andaraí y otros del ayuntamiento para poder ampliar el proyecto de Andaraí. Tenemos un convenio con el ayuntamiento para que funciuone allí una escula donde los niños con más necesidades estudien todo el día (aquí se estudia sólo por la mañana o por la tarde). Queremos ampliarlo y el ayuntamiento va a colaborar con los materiales y la comunidad con la mano de obra. Puedo decir que hace un buen trabajo como alcalde. Por la tarde tuvimos misas y de camino de una para otra contemplamos el paisaje tan bonito que aparece en la foto.

Hoy por la mañana fuimos a fiscalizar las cuentas públicas en Itaetê y en poco tiempo descubrimos una cantidad de desvios de fondos públicos que uno se queda alucinado. Lo peor es que la mayoría no reacciona y esto es difícil de cambiar. ¿Cuando va a despertar esta gente?

Un abrazo.