Días de fiesta

Hola a todos/as:

Estos días han sido tiempo de fiesta. El fin de semana fiesta del Divino Espíritu Santo en Andaraí y una comunidad de la zona rural de Itaetê y ayer fiesta de San Antonio en dos comunidades, una de cada parroquia, por cierto una en cada extremo, lo que supuso 300 kilómetros bahianos de coche (hoy todavía lo celebraremos en otra comunidad de Andaraí).

Las fiestas son momento de encuentro para mucha gente. La participación fue numerosa, aunque una buena parte sólo aparece en la iglesia en estos días, pues es lo que fue vivido durante muchos años. Los políticos aprovechan para hacerse ver (ayer en la procesión de San Antonio, un concejal, que sólo va a la iglesia ese día, se convirtió de tal manera que llevaba hasta vela). Son cosas que uno tiene que aguantar, pero también aprovecho para decir algunas cosas que ellos deben escuchar (no siempre entienden, pues la inteligencia no está muy presente en la mayoría de los políticos). Las lecturas de ayer daban mucho juego para eso. Lo del ojo por ojo y diente por diente cada día está más presente.

Lo mejor de todo es que la gente que participa de las comunidades poco a poco va entendiendo lo que pretendemos y la necesidad de separar iglesia y políticos y de que nadie se aproveche de la fiesta para figurar. En la fiesta del Divino de Andaraí un niño es escogido por sorteo entre los candidatos para ser emperador para el año siguiente. Este año había dos candidatos, uno de una familia más humilde que participa de la comunidad y que este año hizo la Primera Comunión y otro que es de aquellas familias que nunca van a la iglesia y que aprovechan la fiesta para mostrarse. Salió el nombre del primero, para alegría de la mayoría, entre ellos el cura.

En este sentido vamos dando pequeños pasos. Hemos conseguido que a partir del próximo año para ser candidato, deben participar de la catequesis o haber hecho la Primera Comunión y que sean presentados por la comunidad en la que participan. Es una fiesta de muchos años (desde el siglo XIX), que mueve muchos intereses políticos, económicos... y que hay que cambiar poco a poco y usando la cabeza para no dar pasos en falso. Lo mejor es que no es el cura el que lo decide, sino que es una decisión de las comunidades, representadas en la reunión del núcleo de comunidades de la ciudad de Andaraí, aunque no voy a negar que yo di la idea para ser estudiada.

Además de todo esto, este año fue un momento histórico, pues por primera vez en la historia de la fiesta no fue el obispo o el cura quien coronó al emperador. Este pidió si podía ser coronado por Bezinha, una mujer santa, que además de atender a la gente en la secretaría, da la vida por las comunidades y por los más pobres y es una referencia para mucha gente en Andaraí. A mi me pareció estupendo, pues soy de la opinión de que aquello que pueden hacer los laicos, no debe hacerlo el cura, y además Bezinha merece esto y mucho más, aunque ella dice que casí se cae del susto y que no paró de temblar, pues lo supo en el último momento (era peligroso decirselo antes, pues probablemente hubiese huído). En fin, cosas interesantes, nuevos pasos para conseguir mejorar las cosas y ser semilla del Reino.

Seguimos luchando para que el Banco del Nordeste no salga de Andaraí. De momento el presidente fue dimitido por la mala gestión de este problema de Andaraí (este es un banco público y los cargos son decididos por el presidente de la república). Hablando con el alcalde el domingo después de la misa intercambiamos algunas ideas para llevar a cabo en caso de que en las reuniones (ayer por la tarde tuvo una en Salvador) no lleven a donde queremos llegar. No podemos dejar Andaraí sin banco, sería la muerte del municipio y eso no puede pasar de ninguna manera. Ya os iré contando.

Un abrazo.