La calidad antes que la cantidad

Hola a todos/as:
Hoy, antes de la misa, comentábamos que el tiempo pasa volando, demasiado deprisa, pasan los días, las semanas, los meses, los años (Hoy pongo una foto antigua en la que se ve del otro lado del río, con las ventanas abiertas, la casa parroquial de Andaraí, donde estoy viviendo). La misa fue en una comunidad de la zona rural. Eramos 9, hice 80 kilómetros de coche, pero sin duda valió la pena, pues una vez más descubrí la fe de la gente y cómo agradecen a Dios por cada cosa que Él les da cada día. En una sociedad y una Iglesia en las que muchas veces las cosas se miden en términos cuantitativos y no cualitativos, doy testimonio de que la calidad siempre debe prevalecer. 
El tiempo de Pascua se nos escapa como agua entre los dedos, como agua que nos da vida, que riega esta región tantas veces seca de tantas y tantas cosas... Por cierto, esta semana llovió un poco y para esta gente no hay cosa mejor que esa, es como si les tocase la lotería. Aquí se dice que hace buen tiempo cuando llueve y malo cuando hace calor.
El fin de semana, como es de costumbre, pasó entre misas en las diferentes comunidades, también entre noticias tristes, pues cuatro personas murieron en accidentes de tráfico, consecuencia de la falta de prudencia y del exceso de bebida, una verdadera lacra social, que difícilmente será atajada algún día.
El lunes, en teoría es día libre, pero esta semana no tocó, pues estuve haciendo las cuentas de la parroquia y por la noche fui con tres personas a participar de un curso de formación de consejeros municipales en Ruy Barbosa. Los consejos municipales son organismos que controlan la gestión pública en las diferentes áreas, a nivel municipal y estatal y que en teoría tienen bastante poder de decisión, otra cosa es en la práctica. Por eso siempre es bueno que la gente sepa de sus derechos para que la sociedad pueda mejorar cada día.
El martes fue día de médicos y por la noche de formación bíblica. Estamos estudiando ahora el Evangelio de Lucas, por el que reconozco tengo una predilección especial, pues nos muestra a imagen de un Dios infinitamente misericordioso. Frente al Dios que premia a los buenos y castiga a los malos, que aprendimos en el catecismo, aparece un Dios que es misericordioso con todos, especialmente con los pecadores, con aquellos que los "buenos" llaman de "malos". Reconozco que hay gente que sale un poco descolocada, pero al final se trata de eso, porque si Dios hace alguna cosa con nosotros es descolocarnos y llevarnos a verlas cosas de una forma diferente a la que la sociedad nos ha acostumbrado.
Ayer fue día para preparar cosas para futuras reuniones y por la noche clase de español, que sorprendentemente muchos se toman en serio. Hoy por la mañana empecé con las clases de pilates. Es una forma de obligarme a hacer los ejercicios que debería hacer, pero que en casa no hago. Lo peor es que empieza a las 6 de la mañana... Pero uno ya se va haciendo viejo y cada vez cuesta menos levantarse pronto. Después estuve leyendo el blog de un cooperante español en Bangassou, República Centroafricana, el segundo país más pobre del mundo, donde unos locos llamados Seleka han acabado con un país entero, especialmente con todo lo que es de la Iglesia Católica. Es una historia que nos lleva a pensar mucho. Os dejo aquí el enlace por si a alguien le interesa http://macuyangel.wordpress.com/author/macuyangel/ 
Entre tanto la obra en mi casa continua, parece la de El Escorial. Cuando no falta una cosa, falta otra. Es un verdadero ejercicio de paciencia, pero bueno, aquí o tienes buenas dosis o acabas subiéndote por las paredes...
Un abrazo.

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