Dios cuida de quienes el gobierno brasileño ignora y desprecia

Hola a todos/as:

La misión te hace pasar por situaciones inimaginables, por momentos qe difícilmente se olvidan aunque pasen años y años. Vivir en lugares donde quienes mandan no se preocupan por el bienestar de la gente hace que uno, en muchos momentos, sólo pueda confiar en Dios, el único que cuida de los más pobres.

En la madrugada del miércoles al jueves, mientras dormía, fui sorprendido por el comandante del Pelotón de Frontera del Ejército, quien me pedía ayuda para ir con el tractor a trasladar a una mujer que estaba de parto y no tenía posibilidad de dar a luz de forma natural. Era necesario una cesárea y para eso habría que llevársela hasta la ciudad.

Parece que cuando las cosas se tuercen, todo se complica cada vez más. Después de conseguir llegar a la comunidad con cierta dificultad, dadas las pésimas condiciones del “camino” colocamos a la mujer en el remolque tumbada sobre unos colchones. A la vuelta el tractor se atolló en un banco de arena. Era de madrugada, en medio de la selva amazónica, y había que actuar con rapidez, pues dos vidas estaban en serio peligro.

El comandante movilizó a los soldados que acudieron corriendo para trasladar a la paciente en una hamaca. En cuanto eso los pocos que estábamos con ella la trasladábamos en un colchón hasta que los militares llegasen. Los gestos de dolor de la mujer eran tremendos, pero aquí uno entiende lo que para una madre significa la vida de un hijo y como para cuidarlo soporta cualquier dolor.

Llegamos al “puesto de salud” de Parí Cachoeira, donde estos días hay un equipo médico, lo que ayuda, pero no resuelve problemas básicos, pues faltan medicinas, instrumentales... hasta el punto de que la tensión de la madre estaba alta y no había nada para bajársela.

Después de ponerla suero se fue en una lancha para la ciudad. Un viaje de más de doce horas en una pequeña canoa, donde no hay lugar ni para que el paciente se pueda tumbar con un mínimo confor, a pleno sol, con un niño que quiere salir y no puede... y con la única compañía sanitaria de una enfermera que hace lo que puede, pero a la que no se le pueden exigir milagros.

Algunos podrán preguntarse porque no fue enviado otro tipo de transporte más rápido. La respuesta fue que el helicóptero estaba en reparación. Pero a las pocas horas ese “helicóptero en reparación” apareció, no para buscar a la paciente, sino para repostar combustible pues estaba en camino para una comunidad donde iba a llevar funcionarios de la salud para hacer un trabajo que, ante una urgencia como la que se estaba viviendo, bien podría esperar. La misión del helicóptero es rescatar pacientes de forma urgente...

El comandante de los militares pidió al piloto que fuese a buscar a la mujer que iba en la lancha par así ganar unas horas que podrían resultar decisivas, encontrando una respuesta negativa, dejando que Dios y la suerte se ocupasen de ella. Pero Dios no se olvida de su pueblo, de aquellos que el mundo descarta y les trata como si no existiesen. Finalmente llegaron al hospital, el niño nació y los dos se están recuperando.

Recientemente, el nuevo Ministro de Sanidad brasileño, que forma parte de un gobierno que asumió el poder como consecuencia de un golpe de estado parlamentario, decía que “la sanidad indígena es mucho gasto y poco resultado”. Le pregunto si le gustaría ver a su mujer, a su hija, a su hermana en una situación similar a la que esta mujer indígena pasó para tener a su hijo. ¿Qué va a ser de esta gente si la nueva Propuesta de Enmienda Constitucional (PEC 241) es aprobada y se congelan los gastos en educación y sanidad durante veinte años?


Una sociedad que maltrata a quien no tiene nada es una sociedad condenada a la muerte. No podemos callarnos ante tantas situaciones injustas con las que nos encontramos cada día, pues Dios continúa clamando en aquellos que sufren la humillación y el desprecio de quienes detentan el poder.

Un abrazo

Comentarios

  1. Lindo... Deus ilumine sempre sua missão, sua vida e sua vocação de ser missionário... sua experiência de vida é um exemplo de amor serviço... Parabéns. abraço

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  2. Parabéns... Você é iluminado, determinado e muito humano. Que Deus continue te guiando para servir ao próximo e motivar pessoas comuns a enchergar uma melhor maneira de ver a vida diante de tantas dificuldades. Um abraço.

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  3. Estoy emocionada de leerlo. Me alegro que su sufrimiento no fuera en vano y vuelva a casa con su hijo feliz

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